Mick
Jagger, el líder de la mítica banda que estos
días celebra sus 40 años en escena, nació
en Dartford, Gran Bretaña, el 26 de julio de 1943.
Su padre era profesor de educación física y,
de vez en cuando daba clases prácticas en TV, en las
que Mick apareció en más de una ocasión
como modelo. El deporte, sin embargo, no era lo suyo y, en
cambio, pronto destacó como buen estudiante. A los
16 años quería ser periodista, pero a los 18
consiguió una beca para estudiar en la Escuela de Ciencias
Políticas y Económicas de Londres, donde se
decantó por la rama política.
Desde adolescente, a Mick le había apasionado la
música, especialmente los ritmos del blues y el rythm&blues
americanos. Como él, Keith Richards (luego guitarrista
de los Rolling Stones) también coleccionaba discos
que no estaban en el mercado británico. Se conocían
desde niños y, un día, se encontraron en el
tren. Keith vio que Mick llevaba unos discos de Chuck Berry
y Little Walter bajo el brazo y se acercó. A partir
de entonces naceria una sólida amistad. Quedaban a
menudo para intercambiar discos y tocar la guitarra en casa
de uno u otro y, finalmente, decidieron formar una pequeña
banda, “Little Boy Blue and The Blue Boy”, con
la que actuaban como amateurs en pequeños locales de
las afueras de Dartford.
En 1962, estando ya en la Universidad, Mick vio un anuncio
en el que un tal Brian Jones solicitaba músicos y vocalistas
para montar una banda. Acudieron a la llamada y montaron un
grupo de rock al que pusieron de nombre “Rolling Stones”.
Al principio, Jagger ensayaba sólo los sábados,
ya que el resto de la semana lo dedicaba a sus estudios, pero
llegó un momento en el que sus compañeros, necesitados
de pequeñas giras, le obligaron a elegir y el joven,
enfrentándose a sus padres, optó por la música.
En 1965, los Stones consiguieron su primer gran éxito
con la canción “Satisfaction”. Aquel tema
les abrió las puertas hacia el estrellato, consagrándoles
como un grupo rebelde y provocador frente a “The Beatles”
(con quienes, a pesar de su supuesta rivalidad, colaboraban
a menudo). Comenzaron entonces las giras por todo el globo,
el ritmo de trabajo desenfrenado, las drogas, el alcohol y
los escándalos sexuales. Por entonces, Mick ya había
dejado a su primera novia, Chrissie Srimpton, para pasar a
los brazos de Marianne Fatith-full, una bella joven de familia
aristocrática que acababa de salir del internado y
hacía sus pinitos como cantante de folk. Eran los años
60 y la filosofía del “sexo, drogas y rock &
roll” estaba a la orden del día. Las fiestas
orgiásticas en las que participaban los Stones no eran
desconocidas para nadie, especialmente después de que,
en 1967, Mick y Keith fueron detenidos por la policía
cuando estaban en pleno éxtasis de drogas y sexo. Los
agentes encontraron a Marianne completamente desnuda, con
una barrita de chocolate entre las piernas, drogada y rodeada
de hombres completamente alucinados por los efectos de estupefacientes.
Mick y Keith ingresaron en prisión, pero, debido
al alboroto que armaron sus múltiples fans, salieron
a los tres días en libertad condicional. Aun así,
Mick se mostró muy asustado la noche de la detención,
llegando incluso a verter algunas lágrimas sobre el
frío suelo de la celda en la que le encerraron. Y es
que é1, por muy provocador que apareciese sobre el
escenario, era un chico de 24 años, educado en el seno
de una familia de clase media.
Su relación con Marianne duró hasta 1971.
Mick era muy celoso y, aunque él retozaba alegremente
con cuantas chicas se le ponían delante, no soportó
que su novia tuviera una aventura con otro.
Por entonces, Brian, fundador del grupo, ya había
muerto, ahogado en la piscina de su casa, y Mick se convirtió
en el líder absoluto de los Rolling Stones. Debido
a la excesiva presión del fisco británico, la
banda de rock había decidido fijar su residencia en
Francia.
El 13 de mayo de 1971, Mick se casó con Bianca Pérez,
hija de un importador nicaragüense. La boda se celebró
en Francia y ella ya estaba embarazada de su hija, Jade, que
hoy tiene 32 años y ya le ha dado al cantante dos nietos.
El matrimonio duró seis años, en medio de los
cuales el líder de los Stones tuvo numerosos líos
de faldas con varias mujeres, una de las cuales, la cantante
de color Marsha Hunt, le dio un hijo.
Tras un romance con Margarett Trudeau, y cuando estaban
en boca de todos sus supuestas relaciones sexuales con artistas
como David Bowie, Andy Warhol, Rudolf Nureyev o Eric Clapton,
e incluso -según se comenta- con la princesa Margarita
de Inglaterra, Mick se enamoró de la modelo Jerry Hall,
junto a la que ha permanecido durante 20 años. Ella
le ha dado cuatro hijos: Elisabeth Scarlett (que hoy tiene
17 años), James ( 16 años), Georgia (10) y Gabriel
Like Beauregard (4).
Tras diez años de convivencia, se casaron en Bali,
en 1990, por el rito hindú. Parecía que esta
belleza rubia había conseguido que Mick sentara la
cabeza. Rodeado de su familia, se le veía feliz, pero,
aun así, su enorme apetito sexual pudo más que
él y volvió a caer en la infidelidad en diversas
ocasiones con modelos como Sophie Dahl o Carla Bruni. El escándalo
que, en 1999, supuso el embarazo de la modelo brasileña
Luciana Giménez, quien proclamó a bombo y platillo
que el hijo que esperaba era de Mick Jagger, acabó
con la paciencia de Jerry Hall, y más aún cuando
las pruebas de ADN a las que se sometió al niño
confirmaron que el cantante era su padre. Jerry y Mick se
divorciaron y el líder de los Stones no tuvo más
remedio que reconocer al pequeño Lucas como hijo suyo,
pasándole a su madre una sustanciosa cantidad de dinero
al mes para su manutención.
Desde 1985, a nivel profesional, Mick, además de
continuar con los Rolling Stones, también ha lanzado
varios discos en solitario, aunque llevan el sello indiscutible
del mítico grupo musical. Tras algunas desaveniencias
con Keith Richards, la banda realizó una gira por América,
Japón y Europa en 1989, y otra por Europa en 1990,
y no han parado de sacar discos al mercado. Actualmente, y
cuando ya hace años que todos peinan canas, preparan
otra gira para conmemorar sus 40 años sobre los escenarios.
Sin embargo, los Stones de los 60 y 70 ya no son los mismos.
Los años no pasan en balde y Mick, a punto de cumplir
59 años, se ha vuelto un hombre respetable que, a veces,
se avergüenza de aquella época de drogas y sexo
desenfrenado. Ahora dirige su propia productora cinematográfica
(Enigma), ejerce de abuelo de sus dos nietos, practica deporte
casi a diario y se cuida de no cometer excesos. En definitiva,
se cuida como nunca antes lo había hecho, ya que cree
que “Dios ha sido demasiado clemente conmigo”.
Él, que siempre ha sido el miembro de los Stones
que más se ha preocupado por las ganancias que le reportaba
su trabajo, ahora afirma que “procuro alejarme de mis
bienes materiales y preguntarme qué hago en el mundo”.
VÍDEOS DE Mick Jagger
A continuación podemos ver un vídeo de Mick Jagger :